El CAE califica de muy preocupante la grave falta de enfermeras que sufren las plantillas de los centros sanitarios andaluces

Desde la organización colegial andaluza, venimos expresando hace tiempo, la necesidad de poner en marcha un procedimiento ágil de contratación, especialmente en el período estival, para contar con un número suficiente de enfermeras que garantice una asistencia de calidad

El Consejo Andaluz de Enfermería (CAE), considera muy preocupante el gran déficit de enfermeras que sufren actualmente las plantillas de los centros sanitarios en Andalucía, agravada en este período estival.

Una vez más, a pesar de denunciar que esto podría suceder, volvemos a afrontar las consecuencias, ante la falta de previsión en la contratación de enfermeras. Ello está generando caos, insatisfacción profesional y una sobrecarga asistencial extrema, para los profesionales que se quedan para atender las necesidades de salud de la población.

La Enfermería siempre ha estado ahí, realizando un esfuerzo considerable para compensar esa falta de refuerzo en las plantillas y la parcial cobertura de las mismas. Sin embargo, no podemos olvidar, que esto supone un riesgo para la seguridad de los pacientes. “Damos lo mejor de nosotros, pero para cuidar, también necesitamos ser cuidados, y eso requiere de una estabilidad laboral y de la adecuada sustitución de los profesionales que se van de vacaciones”. El Consejo Andaluz de Enfermería, ha venido exponiendo esta alarmante situación en todas y cada una de las reuniones mantenidas con la Dirección General de Cuidados y Atención Sociosanitaria, así como en el encuentro el pasado mes de mayo, entre representantes del Consejo Andaluz de Enfermería y la consejera de Salud y Consumo, Rocío Hernández.

Necesitamos un procedimiento de contratación ágil y eficiente

“El sistema sanitario andaluz adolece de un procedimiento administrativo, capaz de dar respuesta con agilidad a la demanda asistencial de la población, así como de dar cobertura rápida y eficiente a las contrataciones por vacaciones de enfermeras y enfermeros, especialmente en estas fechas. Desde la organización colegial, lamentamos que no se hayan tenido en cuenta las necesidades y previsiones planteadas a la administración sanitaria, por parte de los responsables de Enfermería de los centros, que nos están haciendo llegar su preocupación, algunos de ellos, llegando incluso a presentar su dimisión.

“Esto provoca una situación insostenible, ante unas plantillas de por sí, ya muy mermadas y disminuidas. Por ello, consideramos que se debe implantar urgentemente un procedimiento ágil de contratación, que permita con planificación y previsión, dar cobertura a esta alarmante disminución de las plantillas”.

Por este motivo y las condiciones de los contratos que se ofertan, sufrimos la fuga constante de nuestros profesionales a otras comunidades autónomas e incluso a otros países, en busca de condiciones laborales dignas que no encuentran en Andalucía. Si hablamos de las enfermeras recién graduadas, formadas en nuestra comunidad autónoma, así como los especialistas que acaban su residencia, seguimos padeciendo un éxodo constante, allí donde les ofrecen mejores condiciones de trabajo. “Esto provoca una irreparable pérdida de talento profesional, en cuya formación se ha invertido mucho esfuerzo económico, profesional y personal.

Nos convertimos en grandes exportadores de profesionales, muy cualificados y formados, que tienen que trasladarse para poder ejercer la profesión para la que se han preparado durante años”. Más del 50% de las enfermeras que se gradúan anualmente en las facultades de nuestra comunidad autónoma se marchan.  

Según los datos del INE a 31 de diciembre de 2024, Andalucía sigue manteniendo una baja ratio enfermera-habitantes; 556 enfermeras por cada 100.000 habitantes. Una cifra que se sitúa muy por debajo de la ratio media española, que es de 636 enfermeras por 100.000 habitantes, o de la europea, que se sitúa en 819 por cada 100.000 habitantes.

Desde el CAE, insistimos en la necesidad urgente de resolver una situación que con el tiempo se ve agravada, y que a día de hoy se está volviendo insostenible, para pacientes y para profesionales.